Las primeras referencias del consumo de té se originan en China , donde la leyenda cuenta que una hoja cayó al agua en ebullición para el emperador Shen Nung, a quien el sabor le resultó refrescante.
La más difundida es la del Emperador chino Shen Nong , alrededor del año 2737 a. de C. Se relata que se quedó dormido bajo un árbol y durante su sueño se levantó una ligera brisa, varias hojas de un árbol se desprendieron y se posaron en el agua hirviendo. Fue así como nació el té.
(Wikipedia, 2024)
